Por Tapadillo
Estos partidos como el que disputó este fin de semana el Liverpool contra el Manchester United, me asustan aún más que aquellos en los que Torres se deja la puntería en la mesilla de noche. Lo de la puntería puede ser cuestión del pie con el que te levantes; pero el bajón de forma, el cansancio físico y psíquico... eso suele llevar más tiempo. En el Atlético solía tener algunas rachas en las que estaba muy raro, sin fuerzas, sin velocidad, sin ideas, sin chispa. Se hablaba hasta de desgana, algo que irritaba a muchos atléticos, y que le ha valido bastantes críticas.
No sé a qué se debían esas rachas. La verdad es que los entrenamientos y la preparación física en el Atético, por lo menos el año pasado, se limitaban a la carrera contínua y el foot- volley; y tampoco creo que motivase demasiado el juego amarrategui del equipo. Sufrir frente al Levante para pasar los dieciseavos de final de la Copa del Rey, mientras tus compañeros de Selección vivían aventuras épicas por esos campos de Europa...
Pero ahora tiene más motivos que nunca para estar motivado, y allí en Inglaterra se trabaja mucho la forma física. Supongo que será el cansancio y la tensión: Torres lleva muchos partidos muy seguidos (en el Atlético, no estaba acostumbrado a jugar cada tres días), jugando a un nivel muy alto, recibiendo leña por todos los lados, y casi siempre bajo mucha presión. En Liverpool, muchos sospechaban que jugar contra el Manchester justo después de la final de Marsella les iba a perjudicar muchísimo. Sin embargo, después del Bolton tuvo una semana entera para descansar...
Espero que si Benítez nota algo extraño en la forma de Torres, lo cuide, lo mime, lo deje descansar... no lo eche a los leones; porque me temo que todos los que durante estas semanas han tenido que morderse los labios, han estado esperando una ocasión como esta para decir que ellos tenían razón, que acabamos de ver al verdadero Torres, etc. Ha sido un momento muy malo para deshincharse, justo cuando todos los focos estaban sobre Fernando. Obligar a jugar a un futbolista cuando no está bien, perjudica tanto al equipo como al jugador.
Por cierto, lo de la venda... En algunas fotos del partido contra el Reading, se ve una mancha oscura en la rodilla, con muy mala pinta. Podría tratarse de una brizna de hierba y tierra; pero también de una herida profunda. Me asusté al verla. Sin embargo, el martes jugó con venda, y se merendó a todos los defensas.
Bueno, pues la derrota me ha dejado bastante tocada. El Manchester está un pequeño escalón por encima de los demás equipos; y si encima no se te da bien, y no tienes tu día... Me cuesta creer que los de arriba no vayan a tener pinchazos, fallos y malas rachas. Lo que me deja mal sabor de boca es que era una especie de bautizo de fuego para Fernando, una ocasión única para lucirse y consagrarse en Inglaterra. Esperaba una actuación como las del Barcelona, y me temo que tendré que esperar. Quitando el golazo contra el Chelsea, todavía no ha hecho gran cosa frente a los grandes; y eso lo van a utilizar muchos en su contra.
2 comentarios:
Tapadillo, te mandé un email. ¿Lo llegaste a leer? Contéstame si es así, por favor. Un saludo
Lo de la venda...a mi me tiene intrigado. No me fijé si lo llevaba le día de Marsella...ya miraré imágenes... Pero no creo que tenga esos bajones mentales del Atleti...
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