lunes, 6 de septiembre de 2010

El Niño vuelve a sonreír


"En Sudáfrica lo pasé muy mal"


Reportaje en El País
El partido del pasado viernes en el estadio Rheinpark , de Vaduz, contra Liechtenstein dio los primeros tres puntos a España en el estreno de la fase clasificatoria para la Eurocopa de Ucrania y Polonia 2012 y posibilitó el reencuentro de Fernando Torres con el gol. Marcó dos y ya suma 26 con La Roja en 81 partidos. El Niño ha vuelto y el equipo, empezando por el seleccionador, Vicente del Bosque, lo celebró. No marcaba Torres desde el partido amistoso contra Polonia, en Murcia, antes del viaje para disputar el Mundial de 2010, que, en lo personal, fue un calvario para el de Fuenlabrada.

"En Sudáfrica lo pasé muy mal, aunque la victoria me dejó el mejor de los recuerdos", asumió ayer el delantero madrileño del Liverpool al echar la vista atrás y recordar los días en Potchefstroom.

Operado el 18 de abril por el doctor Cugat en Barcelona de un problema de cartílagos en la rodilla derecha, Torres llegó muy justo de forma a la cita y lo pagó. Tan mal le fueron las cosas que terminó siendo suplente en la final y, cuando saltó al campo, se lesionó. Además, remató solo tres veces entre los tres palos y no marcó en ninguno de los siete partidos -participó en todos, en cuatro como titular-.

"Lo colectivo siempre prevalece sobre lo individual. Así que el recuerdo del Mundial no es malo aunque sufriera en lo personal por no poder aportar más. No llegué en mis mejores condiciones tras superar dos intervenciones", admite ahora.

El doctor Peter Brucker, responsable de los nuevos servicios médicos del Liverpool, ha diseñado este verano un plan de trabajo específico para Torres, que sufrió una rotura muscular contra Holanda. "Hemos acortado los plazos. Todo ha ido muy bien. Ahora estamos muy cerca de ver al mejor Fernando. No falta mucho", explicó Brucker en la web del club.

En Vaduz, en el estrecho pasillo entre vestuarios habilitado como zona mixta, la cara de Torres recuperó viejas expresiones: "Estoy contento por la victoria y, no lo niego, también por los goles. No es que me cambie el carácter cuando no marco, pero me gusta meter goles y es parte de mi responsabilidad cuando juego", dijo asumiendo que no es lo mismo perder la puntería en la selección que en su club. "En tu equipo juegas más seguido. En dos semanas puedes tener hasta cinco partidos y una mala racha se lleva peor. Es bastante duro. En el conjunto nacional, como mucho, juegas uno al mes y siempre es más llevadero no meter goles. Te obsesionas menos. Además, normalmente, si no marcas tú, ganas igual".

"Un delantero lo pasa mal cuando no marca. Fernando sufrió mucho en el Mundial porque nunca jugó cómodo. Por eso estamos muy contentos por él", resaltó Capdevila. Iniesta, quien mejor interpreta sus desmarques, ahondó en la teoría: "Los goles le darán confianza. Es bueno para él y bueno para el equipo porque Fernando es un hombre muy importante", añadió el de Fuentealbilla. Cesc, capitán del Arsenal, sabe de qué habla cuando traza diferencias entre el juego del spanish number 9 del Liverpool y el referente en punta de la selección española: "En Inglaterra es diferente todo, absolutamente todo. Así que es normal que marque más goles que en la selección. Para empezar, el Liverpool ataca con muchos espacios porque busca la contra mientras que España es balón, balón y balón, por lo que los espacios son más reducidos". El centrocampista celebró los tantos de Torres, a quien no había visto especialmente atormentado: "Yo llevo mucho peor no jugar un partido que él no meter un gol. En ese sentido, le he visto bien, pero seguro que ahora, que está empezando a coger otra vez el tono, irá a más. Tras haber estado lesionado, marcar goles le dará mucha confianza".

El Niño ha vuelto, es evidente. Ya no siente molestias y a partir de ahí ha ganado en explosividad y ha recuperando la potencia en la arrancada que le convierte en un jugado imparable. "Cuando está bien y arranca, es como un caballo", destaca Reina, su compañero también en el Liverpool.

No niega el propio Torres que está en fase de reencuentro: "Estoy cada vez mejor, recuperando sensaciones". Entonces esboza esa tímida sonrisa tan particular que por sí sola justifica que le sigan llamando El Niño y parece que se le iluminan las pecas. Es el gol, seguramente; ese sano vicio que da de comer al delantero. Con los dos de Vaduz suma 26, los mismos que marcó Butragueño, con La Roja, por lo que es el quinto goleador de la historia de la selección. "Es bonito estar en esas listas", concluye. Y vuelve a sonreír.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Ánimo Fernando!
Tengo actualmente un problema con un cartílago en la pierna derecha, igual que tú, no es grave, pero si no me cuido puede tener más consecuencias, así que no puedo imaginar lo que has pasado estos meses.
La gente te criticaba durante el Mundial, pero acaso olvidaban que habías tenido operaciones previamente? Qué injusto.

Queremos volver a ver al mejor Torres, y como siempre, callando bocas, esas bocas que aprovechan la más mínima oportunidad de debilidad para machacarte. Sigue superándote como siempre, Fernando.

daviniaaa dijo...

Está claro que bien, bien no lo paso más que nada por el no poder ayudar al equipo tanto como le hubiese gustado pero bueno tener esa copa del mundo ha sido lo mejor :)

tapadillo dijo...

Debió ser una "putada" de las grandes. Un momento irrepetible: el que puede ser el último Mundial de su carrera, el Mundial en el que su selección sería campeona; una ocasión única para brillar, para pasar a la historia. Y llegar en el estado de forma en el que llegó, más pendiente de no romperse otra vez la rodilla que de disfrutar del fútbol. Ver cómo sus compañeros hacían historia mientras que a él aguantar una carrera se le convierte en un reto, y no le sale ni un simple control de balón. Ser señalado como la oveja negra de la Selección, verse excluido del orgullo y el cariño que los españoles dedican al equipo, ver cómo su familia y sus amigos sufren por los insultos y desprecios que recibe. Aguantar comentarios como los del señor Borrico o el eurodiputado alemán, sabiendo que no estaba en condiciones para desmentirlos en el campo. Perder en un mes lo único que había ganado en su carrera: el respeto de los españoles, el prestigio internacional, y el honor de haber marcado el gol más importante del fútbol español.

Y saber que no volverá a vivir una ocasión igual.

No sé porqué el fútbol lo quiso excluir de aquella fiesta del fútbol español de manera tan cruel. Por mucho que él también tuviera la copa en sus manos, y ahora tenga la medalla colgada en su casa. Sólo hay que ver las fotos de las celebraciones, las que pasarán a la historia: Torres no aparece en ninguna (y no creo que sea por su timidez y discreción, porque en las de la Eurocopa "chupa" cámara un poco más, como si sintiera que hubiera ganado el derecho a aparecer en la foto de los campeones). Todos tuvieron su momento para reivindicarse; y cada vez tengo más la sensación de que ese momento le tocaba a Torres en la final (que el gol no llegase hasta que él tocó el balón por primera vez...), pero que se lo robaron (sólo jugó cinco minutos al final de la prórroga). Aunque claro, quién habría puesto en la gran final a un Torres que había estado cojo durante todo el campeonato, en lugar de Villa o de Pedrito.

Sólo espero que alguna vez el fútbol le de alguna ocasión para resarcirse. Porque ya le debe demasiado. No sería justo que Torres cuelgue las botas en un futuro, y sólo se le recuerde como el peor jugador de la España de los jugones.

daviniaaa dijo...

Tapadillo para los que le seguimos desde hace años nunca será el peor jugador de españa o de dónde sea, quien dice eso es porque no lo ve jugar o simplemente por otras razones más estúpidas y ya sabemos cuales son, así que de eso hay que pasar, los que le seguimos somos los que debemos darle su lugar, porque somos los que verdaderamente sabemos lo que vale, de nada vale que lo tengan en los cielos un tiempo y cuando crean que ha vuelto a fallar lo hunden como paso ahora en la eurocopa era un dios y ahora nada? gente hipócrita nada más!!